Una de las cosas que me llamaba la atención en el Boxster 718 era la falta de protección comparado con versiones anteriores.
Por ejemplo, ya no traían las piezas de vinilo transparente detrás de las puertas, que servían para amortiguar el impacto de las piedrecitas. Por tanto, pedí al taller de vinilado que me instalara dos piezas a medida para este coche.
En la parte frontal, y en especial en la versión GTS, están totalmente expuestos los radiadores, sin ni siquiera unas pequeñas aletas que llevan, por ejemplo, los 987.
Sabía por mi experiencia en los 987 que, por allí entraban hojas, ramitas y lo que era peor, chinitas que dejaban sus marcas en los mismos, a pesar de llevar esas aletas. En una revisión que hice del Boxster Black, pedí al centro Porsche que me limpiaran la zona. Me contaron que habían sacado suficiente material como para llenar una bolsa de compra.
Por tanto, con este “Indian Red”, tan vulnerable, no podía imaginar como estaría esa zona después de unas cuantas concentraciones por carreteras secundarias y siguiendo de cerca al roadster de delante.
Busqué información en varios foros especializados de la marca y, después de leer la opinión de varios propietarios, decidí que tenía que hacer algo y encargué un kit de protección a medida. (Por cierto, recuerdo haberlo visto en el Mazda Nd de
@Fer58 hace un par de años).
Me llegó a finales de abril, pero no fue hasta ayer que lo pude instalar y ha quedado así:
Creo que el negro va de perlas con los otros acentos negros del coche y ahora, el coche parece “terminado”.
Hago mías las palabras de un estimado amigo: “la verdad, ahora más que nunca estoy muy contento con la compra de este coche.”